Alta discriminación y falta de oportunidades para la población indígena

Foto: Leticia Jiménez Muñoz.


Oaxaca y Chiapas registran los mayores porcentajes de población indígena sin acceso a servicios de salud, según INEGI.

Por: Leticia Jiménez Muñoz

De acuerdo a la Encuesta Nacional sobre Discriminación en México (ENADIS) aún existen serios rezagos en relación a los derechos y las oportunidades que tiene la población indígena de nuestro país para acceder a una situación más igualitaria con respecto a la población no indígena; esto cuando el 37 por ciento de la población de habla indígena señala que no se respetan sus derechos y el 24 por ciento de este mismo grupo afirma que esto es causado por su acento al hablar y por su forma de vestir.

Por otro lado, en relación con el derecho a la educación, que constituye una de las herramientas más útiles y necesarias para el desarrollo de las personas, actualmente en México el 28.2 por ciento de la población de cinco años y más, hablante de lengua indígena no sabe leer y escribir, problema que se agrava en el caso de las mujeres pues, a diferencia de los hombres, que tienen un porcentaje de analfabetismo de 22.3 por ciento, ellas alcanzan el 33.8 por ciento, según el Censo de Población y Vivienda 2010-INEGI.

El 9.7% de los niñas y niños de 6 a 14 años hablantes de lengua indígena no asiste a la escuela.

En el caso del acceso al derecho a la salud, datos del último Censo de Población y Vivienda señalan que 42 de cada cien personas hablantes de lengua indígena no son derechohabientes a servicios de salud a nivel nacional. A nivel estatal, los estados de Oaxaca y Chiapas registran los mayores porcentajes de población indígena sin acceso a estos servicios, en un rango de 18 a 21 por ciento.

En 2010, 16.1% de las adolescentes de 15 a 19 años y 57% de las jóvenes de 20 a 24 años que hablan lengua indígena ya habían sido madres de por lo menos un hijo nacido vivo.

Ahora bien, con base a los datos de la ENADID 2009 dejan ver que el conocimiento y uso de métodos anticonceptivos entre las mujeres en edad fértil que hablan lengua indígena es menor respecto a las que no hablan lengua indígena: en las primeras, 85% conoce al menos un método de control natal y 43.3% lo usa; en las segundas, 98.7% conoce al menos uno y 50.2% lo usa.

El 21.6 por ciento de mujeres hablantes de lengua indígena en edad fértil unidas, están expuestas a un embarazo y no hacen uso de un método anticonceptivo, a pesar de su deseo expreso de querer limitar o espaciar su descendencia; en las mujeres que no hablan lengua indígena la demanda insatisfecha es de nueve por ciento.

En el ámbito del empleo, según el mismo Censo de los 2.8 millones de hablantes de lengua indígena mayores de 12 años 2.7 tenían empleo. Destaca el hecho de que la población económicamente inactiva representa la mitad de la población indígena en este grupo de edad, que en su mayoría se dedica a realizar actividades de trabajo doméstico en su propio hogar, lo cual permite suponer que no reciben ingreso alguno.

Es de mencionar que de acuerdo con la información que proporciona la Muestra del Censo de Población y Vivienda 2010, en 12 estados del país, ubicados principalmente en las regiones Centro, Sur, y Sureste se localiza casi 90% de la población que habla alguna lengua indígena, sobresalen de este grupo Chiapas y Oaxaca, en las cuales reside más de una tercera parte de la población hablante de lengua indígena.

Ante tales cifras que dejan ver un ampliamente que la población indígena en México es presa de una alta discriminación y de carentes faltas de oportunidades de vida, es necesario que todos los esfuerzos en materia normativa deberán ser acompañados de políticas en favor de la inclusión y la igualdad de las personas, manifestó Conapred, por puesto que “la situación de discriminación de las personas indígenas se agrava cuando dos o más factores de exclusión o vulnerabilidad se ligan, por ejemplo; la condición de pobreza, condición de género, alguna discapacidad, condición migrante, pertenencia a alguna minoría religiosa, etc. Esto amplía aún más la brecha de la desigualdad para el ejercicio de los derechos y la calidad de vida digna para ese grupo de población”.



La periodista Chiapaneca Susana Solís Esquinca recibe premio nacional “AMMPE 2011”



Este fin de semana la periodista Susana Solís Esquinca, recibió el Premio Nacional de Periodismo y Literatura AMMPE 2011, en la categoría de medios electrónicos por el reportaje "Un viaje sobre el lomo de la bestia", presentado en el Noticiero de Joaquín López Dóriga, de la empresa Televisa.

El reconocimiento fue entregado por el Gobernador de Durango, Jorge Herrera Caldera y por la Presidenta de la Asociación Mundial de Mujeres Periodistas AMMPE, Rosa María Valles en la ciudad de Durango, sede nacional para la entrega de estos premios.

Solís Esquinca compitió con más de 400 trabajos presentados por mujeres periodistas de 24 estados del país, otorgándole el premio por unanimidad.
"Un viaje sobre el lomo de la bestia", reportaje presentado en dos partes, narra el viacrucis que sufren los migrantes centroamericanos la cruzar México a través del ferrocarril costero, exponiendo los peligros y las vicisitudes que sufren estas personas en su afán de llegar a Estados Unidos, "una aventura que supera lo inimaginable, donde las víctimas más vulnerables son las mujeres y los infantes", dijo la periodista.

Fueron también premiadas profesionales de los estados de Chihuahua, Veracruz, Puebla, Hidalgo, Durango, entre otras; en los géneros de reportaje, entrevista, crónica, opinión, artículo histórico y literario.

En el mismo evento también fue premiado el reportaje "Basta de feminicidios en San Cristóbal de las Casas", en la categoría de estudiante; cuyo artículo fue publicado en la revista " Ni más ni menos, mujeres" en su edición de mayo de 2011.

Susana Solís Esquinca recibió en el 2003 el Premio México de Periodismo otorgado por la Federación de Periodistas de México (FAPERMEX), por la cobertura sobre la muerte de infantes en el hospital de Comitán.

En el 2007 recibo por segunda ocasión el Premio México de Periodismo otorgado por la Federación de Periodistas de México (FAPERMEX), por la cobertura durante el Huracán “Stan”.

En el 2009 le otorgaron el Premio Internacional “Edison”, por la cobertura del derrumbe de un cerro en la comunidad Juan del Grijalva y la construcción del “Tapón”.

En el 2010 obtuvo el segundo lugar en la Categoría de Revista Radiofónica con el programa “Siempre Mujeres”, otorgado en la 8ª. Bienal Internacional de Radio.